CFA era la empresa peruana con la mayor área concesionada por el estado y bajo certificación FSC por el manejo responsable de sus bosques. 180,000 ha de bosques amazónicos en el departamento de Ucayali manejados bajo los estándares del FSC.

Además de las 180,000 ha manejadas por CFA, la empresa estableció una alianza, con el apoyo de WWF Perú, con la comunidad indígena de Puerto Esperanza. Esta era una alianza que veíamos como un caso modelo a promover y como un ejemplo de trabajo para el país. La alianza incluía, además de realizar el aprovechamiento de la madera de la comunidad Puerto Esperanza, la compra de las especies menos conocidas, dejando a la comunidad, las especies con un mercado ya establecido que facilitaba su comercialización. Además de esto, CFA desarrolló un trabajo de introducción de especies poco conocidas en los mercados donde trabajaba.

Lamentamos profundamente, que iniciativas innovadoras de manejo, comercialización y relaciones con las comunidades haya cerrado. Esperamos que todo lo aprendido sea aprovechado por todas las instituciones involucradas en el quehacer forestal y que estas iniciativas sean continuadas.

Es también el momento de revisar y analizar el porqué del cese de una empresa que venía desarrollando un trabajo muy importante. Tomar las lecciones a ser aprendidas y visualizar los aspectos que requieren del apoyo de las instituciones públicas y privadas para iniciativas similares.